Cuando me pongo en contacto con lo que yo quiero, con lo que me gusta y con lo que deseo, estoy más conectada conmigo, y me resulta más fácil atreverme a pedirlo, a buscarlo, y a disfrutarlo. Porque algunas veces nos conectamos más con lo que quieren los demás de nosotras… que con lo que queremos de verdad. Puedo cambiar el chip de «hacer esfuerzos por agradar al resto»… y estar a gusto conmigo, pensando desde lo que quiero Yo!
Yo, decido conocer…
- qué quiero de las relaciones
- qué me da placer
- cuál es mi ritmo
- qué cosas me gustan y me apetecen
- qué compartir…